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9 minutos | revista 02/2022

Zero emission, full power

El avance del cambio climático exige que también apliquemos conceptos de accionamiento que reduzcan la emisión de gases invernadero en la industria de la construcción.

La LTC 1050-3.1 ahora también con propulsión eléctrica

Para cumplir tanto con las necesidades de sus clientes como con el requisito de compatibilidad medioambiental, Liebherr se abre a todas las tecnologías para encontrar accionamientos alternativos que se adapten de forma óptima al campo de aplicación y el lugar de uso de cada máquina. Nuestra grúa compacta LTC 1050-3.1 cuenta ahora con un motor eléctrico además del sistema de propulsión convencional. De esta forma, los movimientos de la grúa también se pueden realizar con corriente eléctrica si así se desea. Así, la nueva variante de nuestra grúa compacta de 50 toneladas contribuye a reducir las emisiones de CO2 y cumple los requisitos para trabajar en obras «Zero Emission».

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Uso en nave - LTC 1050-3.1 con propulsión eléctrica y cabina elevable en el uso en una nave.

Liebherr ha llevado el desarrollo de la propulsión eléctrica de la LTC 1050-3.1 bajo el lema «Zero emission, full power». Dr. Ulrich Hamme, director técnico de Liebherr-Werk Ehingen GmbH, lo explica de la siguiente manera: «Queremos que nuestros clientes puedan seguir disfrutando de toda la potencia de la grúa con el accionamiento eléctrico alternativo. Como hasta ahora, la LTC 1050-3.1 va a estar equipada con un motor de combustión de diésel o combustible HVO para el desplazamiento por carretera y los trabajos de grúa. Pero, a partir de ahora, se puede usar con un accionamiento eléctrico durante el servicio de grúa y, por tanto, cumplir con los requisitos «Zero Emission». Así, se conservan todas las características de uso anteriores de la grúa, independientemente de si, durante el servicio de grúa, se utiliza con el accionamiento eléctrico sin emisiones o con el motor de combustión».

Máxima flexibilidad para la mayor tolerancia con el medioambiente y mejor uso para el cliente

La nueva alternativa de la LTC 1050-3.1 ofrece la mejor combinación de tolerancia con el medioambiente, uso del cliente y eficiencia. Cuando va por carretera o terreno irregular circula con un motor de combustión convencional de bajas emisiones que corresponde a la categoría de emisiones de gases de escape 5 y que genera una potencia de 243 kW (326 CV). El motor se puede alimentar de forma ilimitada con aceite vegetal hidrogenado (HVO) durante su uso, de esta manera, ya reduce las emisiones de CO2 en un 90 % frente al uso exclusivo con diésel.

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Solución inteligente - El motor eléctrico acciona la bomba de la grúa a través de una caja de transmisión.

En cuanto al servicio de grúa, se puede elegir el motor de combustión o el motor eléctrico de forma flexible según las condiciones de uso. La segunda opción reduce las emisiones de escape y ruido a un nivel mínimo. Así, la máquina también es apta para zonas sensibles al ruido o áreas «Zero Emission».

Concepto simple e inteligente de propulsión eléctrica: propulsión eléctrica de uso flexible

El nuevo accionamiento con motor eléctrico proporciona una potencia de 72 kW y, por lo tanto, permite un servicio de grúa sin limitaciones, es decir, con prácticamente el mismo rendimiento que cuando se usa el motor de 6 cilindros. Para la transmisión de fuerza a los consumidores en la superestructura de la grúa, la propulsión eléctrica usa la bomba hidráulica existente, que, en el caso de la LTC 1050-3.1 convencional, está directamente montada en la caja de cambios.

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Conectar y trabajar - Potencia máxima con 125 amperios, pero para un uso práctico basta con 63 amperios.

En la variante eléctrica solo se añade el motor eléctrico y una caja de transmisión, así como la tecnología de mando necesaria en comparación con el modelo LTC 1050-3.1 convencional. En este contexto, la caja de transmisión se coloca justo entre la bomba de la grúa y la caja de cambios. Esta solución inteligente y, a su vez, sencilla permite cambiar de forma flexible entre una propulsión hidráulica diésel y una propulsión hidráulica eléctrica. Para alcanzar la máxima potencia se requiere una toma de corriente de obra de 125 amperios, pero para obtener un servicio práctico basta con 63 amperios. De forma alternativa, la grúa puede funcionar con un «Battery Pack» convencional si la obra no dispone de una infraestructura eléctrica correspondiente.

Ofrecemos la variante eléctrica de la LTC 1050-3.1 para la versión con pluma telescópica TELEMATIK de 36 metros de largo. Las opciones RemoteDrive para conducción remota y una cabina de elevación regulable en altura también están disponibles para la nueva grúa. Las pruebas intensivas del prototipo con propulsión eléctrica están en pleno desarrollo. Prevemos las primeras entregas para el primer semestre de 2023.

3 preguntas para: Lars Christian Steen - Propietario y director general de Asle Skoveng Kranservice AS

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El enchufe marca la diferencia - Lars Christian Steen (izquierda) y el copropietario Leif Petterhaagstad están impresionados por el concepto de la LTC 1050-3.1 con un sistema de propulsión eléctrica adicional para la superestructura.

Asle Skoveng Kranservice AS se fundó en 1976 y tiene su sede en la localidad de Skedsmokorset, ubicada unos kilómetros al norte de Oslo. Durante casi medio siglo, la empresa de grúas y transporte ha desempeñado un papel importante en la construcción de la capital noruega. Sostenibilidad, seguridad, eficiencia y la reducción de las emisiones de CO2 son elementos fundamentales de la estrategia corporativa de Skoveng.

Ustedes fueron una de las primeras empresas en encargar la nueva LTC 1050-3.1 con propulsión eléctrica, no sólo una, sino que cinco unidades de una vez. ¿Por qué apuesta en las grúas con propulsión eléctrica?

Skoveng apoya el Acuerdo de París sobre la protección medioambiental y sigue una estrategia clara: cero emisiones. Como empresa de grúas líder en la región de Oslo, ya hemos reducido las emisiones de CO2 a un nivel líder en el sector, en parte, gracias al uso de aceite vegetal hidrogenado HVO. Pero haremos aún más. Nuestro objetivo es convertirnos en una empresa de grúas sin emisiones hasta 2025.

Lars Christian Steen: En Noruega se están imponiendo normas cada vez más estrictas en las obras de construcción. Siete grandes ciudades con un total de 1,4 millones de habitantes, es decir, el 27 % de la población noruega, han decidido prohibir completamente las emisiones fósiles en las obras de construcción a partir de 2030. En Oslo, las emisiones de las obras de construcción representan alrededor del 7 % de las emisiones totales de la ciudad. Nuestra capital es pionera y persigue objetivos muy ambiciosos con su estrategia climática y energética. Esto allana el camino a otras ciudades y municipios. En el futuro, solo se permitirán máquinas impulsadas por hidrógeno o electricidad. De este modo, no solo se reducen las emisiones de CO2, sino también la contaminación atmosférica y acústica.

¿Por qué se decidió por las nuevas grúas Liebherr?

Lars Christian Steen: Nuestra colaboración con Liebherr nos ha permitido ofrecer grúas móviles de alta calidad en nuestro mercado durante las últimas décadas. Liebherr suministra máquinas adecuadas para el uso de HVO. Ahora llegó el momento de dar el siguiente gran paso: «grúas móviles de Zero Emission».

Hemos mantenido un diálogo productivo con Liebherr sobre cómo podemos asegurar un futuro con grúas móviles de cero emisiones. A finales del año pasado, Liebherr nos presentó su primera grúa móvil en la que la superestructura se alimenta con energía eléctrica, la LTC 1050-3.1. A continuación, decidimos encargar cinco unidades de estas grúas. Nuestro compromiso con un futuro sin emisiones, combinado con las innovaciones tecnológicas de Liebherr, nos ha llevado a realizar el mayor pedido de grúas móviles de la historia de nuestra empresa.

Al igual que en Skoveng, vemos la motivación y la determinación de Liebherr para asumir un papel de liderazgo dentro de la reducción de la huella de CO2 de las grúas móviles. También compramos una grúa de construcción móvil Liebherr MK 88, que puede funcionar con electricidad en la obra. Y echamos un vistazo a las grúas Unplugged de Liebherr-Nenzing.

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Visión - Lars Christian Steen en la cabina de la nueva grúa LTC 1050-3.1.

¿Cómo evalúa el futuro desarrollo hacia un mayor respeto al medio ambiente?

Lars Christian Steen: También se han fijado objetivos ambiciosos fuera de Noruega. En mayo, Finlandia empezó a apoyar las medidas de sus ciudades con la adopción del acuerdo Green Deal, que estipula que, a partir de 2025, el 20 % de las obras de construcción deberán realizarse utilizando electricidad, biogás o hidrógeno como fuente de energía. A partir de 2030, el gobierno quiere que el 50 % de las obras de construcción se alimenten de estas fuentes de energía renovables. Copenhague, Estocolmo y Ámsterdam también han empezado a avanzar en esta dirección apoyando proyectos piloto e incluyendo criterios ecológicos en sus estrategias de contratación. Muchas ciudades y regiones les seguirán en los próximos años.

Este artículo fue publicado en la revista UpLoad 02 | 2022.

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