14 minutos - revista 01 | 2023
Todo comenzó con grúas RT
¿Le gustaría hacer un pequeño viaje en el tiempo? Entonces echemos un vistazo a la Polonia de hace 40 años.
Por aquel entonces, Polonia era uno de los países que en Occidente se conocían como «Bloque del Este» y se encontraba bajo la curatela soviética. En este momento, las grandes centrales eléctricas de carbón del país buscan equipos potentes para el trabajo de las grúas en sus minas a cielo abierto, que crecen rápidamente, al igual que los puertos de la costa del Báltico. Debido al creciente volumen de mercancías, necesitan equipos de elevación potentes para la manipulación económica de cargas generales cada vez más pesadas en sus terminales. Las empresas estatales encuentran por fin lo que buscan aquí, en Ehingen. El año 1984, con las primeras negociaciones que tendrían como resultado el primer suministro de dos grúas RT Liebherr, marcó el comienzo de una colaboración duradera, sólida y continuada. Hemos visitado a algunos de nuestros clientes polacos.
Recién llegados - Esta escena del patio de uno de nuestros clientes al sur de Poznań es significativa. En medio de la flota de grúas usadas, una colorida mezcla en el sentido literal de la palabra, se encuentra la primera grúa móvil de la empresa Binkowski que se adquirió como grúa nueva. Para su flamante LTM 1230-5.1, el propietario de la empresa, Przemysław Binkowski, cuenta con pedidos en parques eólicos, en otros países europeos y encargos en una fábrica de elementos de hormigón en Poznan.
Por cierto, las negociaciones de aquel entonces se materializaban muy rápido en hechos. Las grúas encargadas, modelo LTL 1060, desembarcaron en el puerto de Gdansk el verano del año siguiente. Estos dos equipos potentes de dos ejes estaban destinados a la central eléctrica de lignito de Bełchatów, en el centro de Polonia. Sin embargo, estas potentes máquinas serían solo el preludio de una relación comercial que florecería muy rápidamente. Poco más de un año después, más de una docena de grúas RT modelo LTL 1030, algo más pequeñas, salieron de nuestra fábrica en dirección este. Se enviaron al puerto de Gdansk, donde se utilizaron para la manipulación de la carga.
A principios de los años 90, unas 40 grúas Liebherr servían a empresas estatales para proporcionar una potente fuerza de elevación; hoy, treinta años después, 1200 grúas llevan el logotipo de Liebherr y operan para más de cien clientes en todo el país. El trato a esos clientes se lleva a cabo desde Ruda Śląska, la sede de nuestra empresa de ventas y servicios Liebherr-Polska sp. z o.o, donde se reúnen todas las divisiones comerciales de Liebherr en el país. En el centro de servicio y reparación de esta ciudad, situada a unas tres horas al suroeste de la capital, Varsovia, también se pueden realizar casi todas las reparaciones de las grúas móviles y sobre orugas de Liebherr en las amplias naves de montaje.
Interés creciente: las unidades MK son muy bien recibidas - Aquí, una MH 80 ayuda en la construcción de un viaducto de un kilómetro de longitud.
De grúas usadas a grúas nuevas
Mientras que hace unos años suministrábamos principalmente grúas usadas a Polonia, hoy nuestros clientes piden cada vez más grúas móviles y sobre orugas nuevas. En nuestra opinión, la tendencia hacia nuevos equipos y la evidente confianza que depositan nuestros clientes en los productos de Liebherr son buenas señales. Sin embargo, el auge de las nuevas grúas no lo ha provocado solamente su floreciente economía, sino también la apuesta firme del país por la expansión masiva de las energías renovables: se planea instalar miles de aerogeneradores. Nosotros mismos también hemos contribuido al éxito de esta asociación. Nuestros clientes se benefician de una asistencia rápida y competente por parte de nuestros técnicos de servicio, de una disponibilidad extremadamente buena y rápida de las piezas de repuesto y, por supuesto, del centro de servicio ubicado en el sur del país. En la página 80 encontrará más información sobre la asistencia que ofrecemos a nuestros clientes.
Liebherr siempre está presente de forma rápida y eficaz.
«Cuando hay problemas en la obra con nuestros equipos, Liebherr siempre está presente de forma rápida y eficaz», Michał Sobolewski, director de obra de Lewandowska, la mayor empresa con diferencia de grúas de Polonia, da fe de ello. Nos reunimos con él en la obra de construcción de un parque eólico renovado, no muy lejos de Żnin, un pequeño pueblo a unos 200 kilómetros al oeste de Varsovia. «En los próximos meses vamos a instalar aquí 27 aerogeneradores Vestas con alturas de buje de 120 metros», nos cuenta Sobolewski. En nuestra visita al futuro parque eólico, podemos ver claramente esta tendencia por los nuevos equipos. Dos flamantes grúas móviles manipulan los componentes de la planta. Una LTM 1250-5.1 descarga las palas del rotor y los segmentos de la torre. Unos kilómetros más adelante, una flamante LTM 1300-6.2 levanta las pesadas salas de máquinas del camión. La impresionante flota de grúas de Lewandowska incluye una grúa sobre orugas LR 1750/2 y varias LG 1750, que se encuentran entre las grúas más potentes del país. Casi todas las grúas móviles y sobre orugas de las cinco sedes de la empresa, unas 60 en total, llevan nuestro logotipo.
Conductor ágil - Jarek Stańczyk recorre las terminales de transbordo del puerto de Szczecin con su potente grúa LRT 1090-2.1. Del gancho de su grúa Liebherr suelen colgar bloques de piedra de hasta 30 toneladas.
Sustitución después de 30 años
En nuestro recorrido por Polonia, nos desviamos para ver una de «nuestras» grúas más especiales. Para ello, viajamos a la Baja Silesia, al triángulo fronterizo con la República Checa y Alemania. Allí, en la mina a cielo abierto de Turów de la empresa energética PGE GiEK, se encuentra la grúa número 40 000 de nuestra producción. Hace más de dos años, enviamos la LRT 1100-2.1 a esta extensa mina a cielo abierto con una extensión gigantesca de unos 25 kilómetros cuadrados. Desde entonces, el potente conjunto de tracción total se ha abierto paso con éxito por el barro de la mina de carbón, que tiene más de 200 metros de profundidad.
Cuando llegamos a la grúa, después de muchos kilómetros por la ladera, entre montones de escombros y capas de tierra, la potente grúa de dos ejes acaba de enganchar la mitad de nueve toneladas de una de las ruedas de cuchara más pequeñas de una excavadora de lignito que se utiliza para romper las vetas. Durante los trabajos de mantenimiento y reparación de las colosales máquinas y de las aparentemente numerosas e interminables cintas transportadoras, vemos varias grúas móviles de Ehingen. En el caso de los componentes pesados o en terrenos difíciles, la primera opción es la grúa rough terrain con su potente pluma. «Esta robusta grúa RT es casi indestructible», nos dicen los operarios de la grúa en la obra. «Además, también puede telescopar su pluma con la carga suspendida. Cuando trabajamos con equipos grandes, esta opción es increíblemente importante para nosotros». Por cierto, la LRT 1100-2.1 sustituyó a una vieja grúa RT Liebherr que llevaba más de 30 años haciendo su trabajo en la enorme mina y que al final de su vida acumuló casi 20 000 horas de operación.
Potencia en terrenos difíciles - La LRT 1100-2.1, con su pluma telescópica de 50 metros, ofrece grandes cargas útiles, necesarias sobre todo para elevar componentes pesados de las enormes excavadoras de carbón.
«Siete bloques de granito en veinte minutos»
La empresa de logística DB Port Szczecin de Szczecin también se ha abastecido de nuevos equipos de elevación. En el puerto de la tradicional ciudad hanseática, fronteriza con Alemania y conectada al mar Báltico a través de la laguna de Szczecin, se manipulan, entre otras cosas, enormes bloques de granito. Aquí, nos encontramos con modernas grúas Liebherr modelo LRT 1090-2.1 funcionando en las terminales. En uno de estos gigantes blancos y grisáceos, que recorren largos callejones entre cientos de grandes bloques de piedra, va montado Jarek Stańczyk. Con un equipo de cuatro personas, el joven carga a gran velocidad los camiones que esperan con estas piedras de cantería que pesan toneladas o levanta las piedras, que han llegado por barco, del remolque rodante. No tiene tiempo para nuestras preguntas ni para una foto rápida de retrato. Eso tendrá que esperar hasta la pausa del almuerzo. Pero aún entonces, tomando una instantánea frente a su grúa, informa brevemente y no sin orgullo de que consigue cargar con su máquina siete de los pesados monstruos en solo veinte minutos. «Mientras no me tenga que mover». Tras estas breves palabras, salta al coche, donde sus compañeros ya esperan impacientes porque tienen hambre. Se marchan al almuerzo.
Daiusz Szklar, jefe del departamento técnico de DB Port Szczecin, encuentra un poco más de tiempo para nosotros. «También cargamos piezas prefabricadas de hormigón y otros tipos de carga general, pero en su mayor parte manipulamos bloques pesados de granito con nuestras grúas Liebherr de alta reseistencia. Por supuesto, para ello necesitamos equipos potentes, porque los más grandes pesan 30 toneladas», explica. «Adquirimos la primera grúa RT hace unos cinco años y ahora utilizamos tres de estas LRT 1090-2.1 en la manipulación de cargas. Las grúas son magníficas, en primer lugar por su facilidad de uso y en segundo lugar por su eficiencia. Tanto si se trata de elevar granos de cacao en un almacén a gran altura como de cargar granito en camiones, ofrecen un gran alcance y la mejor visión de conjunto gracias a la cabina del conductor inclinable. Además, estos equipos se caracterizan por su velocidad y alta estabilidad. Desde mi punto de vista, no tienen comparación».
Tantos elogios al final de un emocionante viaje nos hacen felices, como es de esperar. Nos sentimos muy agradecidos. O mejor aún, en polaco: Dziękuję.
...seguimiento
Ahora podemos echar la vista atrás a casi cuarenta años de historia de Liebherr en Polonia. Marceli Bednarek, entre otros, nos da información e ideas clave sobre el trabajo en el país del este. El ingeniero diplomado es miembro del consejo de administración de la empresa de ventas y servicios de Liebherr en Polonia (Liebherr-Polska sp. z o.o.), así como su director de ventas y marketing. También es un veterano, ya que ha trabajado para Liebherr en ese país durante más de 35 años. También entrevistamos a Bogdan Majek. Nuestro joven colega nos cuenta cómo es el día a día de un técnico de servicio de grúas móviles.
Marceli Bednarek, director general de Liebherr-Polska sp. z o.o.
Sr. Bednarek, como director general de Liebherr-Polska, ¿cómo ve actualmente el mercado de las grúas móviles y sobre orugas?
Marceli Bednarek: El mercado polaco se está desarrollando de forma muy dinámica para nosotros. El país es uno de los mercados más importantes de Europa para nuestro grupo de empresas. En lo que respecta a las grúas móviles y sobre orugas, se observa un creciente interés por adquirir nuevos equipos. En particular, los clientes con una sólida calificación crediticia optan cada vez más por comprar grúas nuevas, a pesar de que en principio la demanda solía ser principalmente de grúas de segunda mano. El año pasado, por primera vez entregamos más grúas nuevas que usadas a nuestros clientes de Polonia.
¿Cómo debemos imaginarnos una típica empresa de grúas en Polonia?
En primer lugar, tenemos una gama muy amplia de clientes. Empezando por las empresas privadas que ofrecen servicios en el mercado. Entre estas empresas, se incluye a muchas pequeñas empresas que operan desde unas pocas hasta varias docenas de grúas. Nuestros mayores clientes con una gama completa de grúas móviles también tienen grúas sobre orugas con una capacidad de elevación de 1600 toneladas. Tradicionalmente, las grandes minas de lignito han sido nuestros clientes durante décadas. Al igual que los puertos del norte del país. También estuvieron entre nuestros primeros clientes comerciales en Polonia, ya que la primera gran entrega de 14 grúas RT de Ehingen fue a Gdańsk en la década de 1980. Se trata de unidades LTL 1030 para la manipulación de carga general.
¿Qué apoyo pueden esperar nuestros clientes y socios en Polonia de Liebherr?
Nuestro mayor punto fuerte, del que se benefician nuestros clientes, es la excelente organización del servicio de Liebherr-Polska. Tenemos sedes cerca de Varsovia, en Gdańsk y en Poznań. Y, por supuesto, nuestra oficina central aquí, en Ruda Śląska, en el sur de Polonia. En nuestra amplia nave de montaje con dos grúas de pórtico, la más potente tiene una capacidad de carga de veinte toneladas, podemos realizar muchas reparaciones en perfectas condiciones. Recientemente, los conductores de grúa de nuestros clientes han podido incluso enviar imágenes en directo desde la obra a nuestro centro de servicio a través del teléfono móvil para el diagnóstico de averías y recibir así ayuda de forma más rápida e inmediata. Por cierto, nuestros vehículos de servicio están equipados con un juego completo de herramientas, que incluye herramientas especiales para la localización de averías en equipos y grúas Liebherr. También ofrecemos a nuestros clientes la ayuda más rápida posible en lo que respecta a la entrega de piezas de repuesto en plazos extremadamente cortos.
Bogdan Majek, técnico de servicio de Liebherr-Polska sp. z o.o.
Sr. Majek, como técnico de servicio, ¿cuál es la rapidez con la que atiende al cliente cuando tiene un problema con su grúa en la obra?
Por supuesto, esto depende de la ubicación de la grúa. Mis diez compañeros del servicio móvil y yo estamos repartidos por toda Polonia. Soy responsable de los voivodatos (distritos administrativos) de Wielkopolskie, Pomorskie, Lubelskie y Dolnośląskie, en el noroeste de Polonia. Por regla general, estamos en las instalaciones del cliente en un plazo de uno a tres días a partir del momento en que se comunica la avería. Además, la urgencia de la situación también influye.
¿Y si tiene que ser muy rápido?
Entonces, naturalmente tratamos de hacer todo lo posible para ayudar a nuestros clientes lo más rápido posible. Por supuesto, tenemos en stock las piezas de recambio que más se necesitan. Así, una pieza de repuesto puede estar en la grúa en un día. En casos extremadamente importantes y urgentes, incluso hacemos llegar las piezas en taxi desde el almacén de Liebherr en Berlín directamente a la obra. Esto nos permite realizar una reparación en pocas horas y, por tanto, con gran rapidez.
Este artículo fue publicado en la revista UpLoad 01 | 2023.